Estudiar y gustar, dos verbos que no suelen rimar

Hoy hablamos sobre el proyecto del grupo 4, ¿para que sirven los estudios? En primer lugar, me gustaría felicitar al grupo al completo por el trabajo realizado, pues a un tema teórico y a priori completamente aburrido como el suyo han conseguido darle un giro de tuerca y volverlo bastante más dinámico y ameno. Esto lo han logrado porque los conozco y se de primera mano que realmente les gusta lo que están haciendo. Todo esto lo digo, no por hacerles la pelota, sino porque será el tema principal de está entrada. Al final de la clase, surgió un debate sobre aquellas personas que por presiones familiares (distintas causas) acaban estudiando carreras que no les gustan o para las que simplemente no están hechas. Sin más dilación, comencemos la entrada:
                        El que no estudia lo que quiere     Si                  Si                                           
¿Cuántas veces nos ha pasado que vamos al médico y nos tratan tan mal que la siguiente vez que nos duele algo esperamos al máximo para ir? o ¿cuantos funcionarios administrativos hemos encontrado que nos han tratado con desprecio a la hora de realizar algún tipo de trámite? Lo mismo podemos aplicar a cuerpos de seguridad, músicos e incluso tenderos. Lo cierto es que tristemente todos hemos encontrado a uno de estos alguna vez en la vida. Esto es claramente una derivación de que quizá esto a lo que se están dedicando no es por una decisión propia, seguramente fuese impuesta por la presión social o simplemente porque no se podía hacer otra cosa, pero lo cierto es que la diferencia es bastante notoria entre aquellos que de verdad se encuentran en una profesión por propia voluntad y los que no. En cambio, cuando al ir al médico, el doctor; era amable ¿no te dan ganas de volver cuando te pase algo? O por ejemplo el caso de Julio César Cisneros, profesor de sociología en la UCLM, cierto es que a muchos, todo el tema de la filosofía y la sociología no nos interesan especialmente, sin embargo, este hombre cada vez que habla consigue mantener la atención de los alumnos (a mi por lo menos me pasa) sin apenas esfuerzo, yo creo que es bastante clara la razón de esto: Le gusta lo que hace. Concretamente, esta carrera, Magisterio, es una de las más afectadas por esto, aunque no la única, medicina, guardia civil, funcionario, ... Como ya he mencionado anteriormente, son muchas las carreras en las que la actitud es condición primordial. Si decimos que hay gente en profesiones en las que no debería estar, entonces también hablamos de que hay profesiones en las que esas personas encajarían a la perfección. Este mar de fallos que se podrían haber evitado, ¿por qué sucede? Lo cierto es que tiene bastante que ver con gran parte de los contenidos trabajados el curso pasado en la asignatura de Sociología: las profesiones actualmente son como esa biblioteca sin leer que suelen tener la gente en su casa. Las profesiones hoy en día son un símbolo, en ocasiones de poder, pero sobretodo de estatus social. Esto crea este ambiente negativo alrededor de muchas profesiones. Este es un problema bastante serio pero, ¿hay alguna medida adoptada por el gobierno? Lo cierto es que ninguna. No hay absolutamente ninguna medida. Por el contrario encontramos medidas como la última tomada en referencia a nuestra carrera, magisterio, básicamente más prácticas una vez acabada la carrera (aquí esta el artículo por si queréis más información).  Y yo me preguntó ¿ de que sirve una vez acabado todo? Ya no solo me refiero a estás, sino a todas las prácticas en general, entiendo que no se puedan realizar nada más entrar en una carrera pues no se dispone de la preparación necesario pero, ¿y al final? Las prácticas son la primera muestra de contacto directo con la profesión que llevamos, como mínimo, 4 años estudiando, si descubrimos, como muchas veces ocurre, que la profesión no es como esperábamos, ya es demasiado tarde.
Personalmente creo que, además de demostrar si se tiene nivel para entrar a una carrera, debería ser necesario algún tipo de evaluación sobre profesionalidad o vocación, y sería conveniente que estás pruebas se realizasen cuanto antes para ayudar a la gente a encontrar su vocación o lugar en el ministerio de trabajo (que épico ha quedado esto) al igual que hay métodos para que gente que no tiene el nivel para entrar a una carrera pueda hacerlo pues se nota a leguas que es su vocación.

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